DIRECTOR

Isabelle Czajka

A Juliette no le agradaba mucho la idea de mudarse a los suburbios de París. Allí todas las mujeres están en los cuarenta, tienen hijos que criar, casas que mantener y maridos que regresan tarde en la noche. Ahora está segura que no quiere llegar a ser como ellas. Juliette está a la espera de una respuesta para una posición importante en una editorial. Una posición que, por supuesto, cambiaría su vida cotidiana.

Vida doméstica (La vie domestique, 2013) es el tercer largometraje de la francesa Isabelle Czajka (París, 1962), quien luego de iniciarse en el cine como asistente de cámara, en los años 80, debutó con el drama L’année suivante (2006), ganador del premio a la Mejor ópera prima del festival de Locarno. A este film le siguió D’amour et d’eau fraîche (2010), que fuera nominado a 2 premios César: Mejor actor revelación (Pio Marmaï) y actriz revelación (Anaïs Demoustier). 

Para su tercer largometraje, inicialmente Isabelle Czajka quería adaptar "Al faro", de Virginia Woolf, una exploración de la vida de una mujer cuarentona, a la vez madre y esposa. Pero, al mismo tiempo, la directora se tropezó por azar con "Arlington Park", de la británica Rachel Cusk: “Finalmente me decidí a adaptarla porque revelaba todo lo que estaba buscando explorar en ese momento, todas las cuestiones que eran importantes para mí acerca de los pequeños problemas de la vida doméstica y conyugal, posmoderna y occidental “.

Según la directora, “la vida doméstica” es un concepto bien específico: "No se trata de la vida amorosa, ni del matrimonio como tal, ni de la vida familiar, es específicamente sobre la vida doméstica, es hablar  con precisión de cómo las mujeres finalmente asumen de manera insidiosa, disimulada y sin que se las obligue realmente, todas estas pequeñas cosas cotidianas que ellas creen deben hacer, convirtiéndose así en definitiva en sus propios verdugos".

Con el fin de ilustrar mejor la cotidianidad de sus personajes, la directora decidió desarrollar la trama en el transcurso de un solo día: "Para mí narrativamente, desde un punto de vista doméstico, un día completo me parecía perfecto". Esto es ciertamente un prejuicio, pero también es un guiño a “Mrs. Dalloway”, la famosa novela de Virginia Woolf.

Czajka quiso trasladar a la pantalla la condición de una cierta categoría de mujeres actuales y su lugar en la sociedad de hoy: "Yo soy parte de una generación de mujeres a las que se les dijo que todo era posible al mismo tiempo: trabajar, tener una carrera, hijos, etc., que esto no era un problema, ahora que el mundo estaba preparado y adaptado a este patrón (...) Pero esto no es del todo cierto. Es aún más complicado (...). Esta película me dio un punto de vista personal para salir de la vida doméstica".