SINOPSIS
Una de las figuras más sugerentes del siglo XX, Howard Hughes, fue un inteligente industrial, productor de glamorosas películas y la quintaesencia del americano que toma riesgos sin preocuparle mucho el fracaso. Se narra una de las etapas más prolíficas de la vida de Hughes: el periodo comprendido entre mediados de los años veinte y los años cuarenta cuando la osadía a la hora de hacer cosas y la pasión por volar de Hughes impregnaron sus esfuerzos como pionero, tanto en la aviación como en la realización de películas. Época de inventos inverosímiles, turbulentas relaciones amorosas y encarnizadas pugnas empresariales, fue también la época en la que las disparatadas ambiciones de Howard Hughes se toparon por primera vez con el coste de la fama, la suerte y su propia obsesión perfeccionista.
REFERENCIA
Personajes marginales tratando de sobrevivir en una sociedad que parece negarles un lugar decente en el mundo; relaciones de lealtad-amor-odio de grupos mafiosos italoamericanos al margen de la ley... Ese es el lado más conocido del cine de Martin Scorsese, esa temática social con la que alcanzó notoriedad y reconocimiento durante los años 70. Nacido en Nueva York (1942), sus padres se trasladaron al ghetto italiano en 1950, por lo que Scorsese se crió y educó en ese medio católico de Manhattan. Como su asma le impedía dedicarse a otras diversiones, su padre le llevaba al cine al menos dos veces por semana, lo que le animó a dibujar story-boards de películas imaginarias.

A los 14 años decidió hacerse sacerdote, pero el rock and roll, las películas que veía en los cines de la calle 42 y sus amigos del Lower East Side de Nueva York, terminaron interesándole más que la religión. Abandonó el seminario y se matriculó en el Departamento de Inglés de la Universidad de Nueva York, pero lo que más le atraia era la realización cinematográfica. Entre sus compañeros de estudio esaban Brian de Palma (a través de quien conoció a Robert De Niro), el cámara Michael Wadleigh (que dirigiría Woodstock en 1970) y Mardik Martín quien colaboró con Scorsese en varios guiones.

La visión de las películas de la Nouvelle Vague francesa le permitió comprender que era posible realizar películas personales con muy pocos recursos.

Los inicios de la carrera de Scorsese como realizador tienen que ver con la búsqueda y consolidación de un perfil creativo. En este periodo cabe destacar Who´s That Knocking at My Door estrenada en 1968 y sobre todo el cortometraje The Big Shave que causó sensación en el Festival de Cine Experimental de Knokkele-Zoute, Bélgica.

En 1972, iniciando una serie de películas con producción de Roger Corman , realiza Boxcar Berta, una mirada violenta e intensa sobre las organizaciones sindicales y otros marginados en tiempos de la Gran Depresión. Film que contó con apoyo de la critica en los festivales y parte de la industria del cine, lo que permitió a Scorsese seguir incursionando en la línea de autor cinematográfico. En 1973 llega Calles peligrosas (Mean Streets), con Harvey Keitel y Robert De Niro, que se constituyó en un gran éxito tanto en Nueva York como en Cannes. Se trata de un retrato de la "Pequeña Italia", con algunos elementos que definirían la obra posterior de Scorsese. A partir de aquí Scorsese se sumiría, y aun sigue, en un torbellino creativo que le llevó a ser uno de los cineastas mas admirados en su época, y que poco a poco fue denostado por unos y por otros.

Alice Doesn't Live Here Anymore (1974) contó con una actuación inolvidable de Ellen Burstyn, y comprobó la capacidad de su autor de tratar con inteligencia a un personaje femenino. Pero será su siguiente película Taxi Driver (1976) la que lo confirmará como uno de los grandes creadores del cine norteamericano. Aquí el contexto es demonizado por la mente de un sociópata (Robert De Niro) que se convertirá a sí mismo en un ángel redentor terminando con un antro de mafiosos y chulos.

Luego de un musical (New York, New York, 1977) y de un documental musical (The Last Waltz, 1978), en 1980 Scorsese filma Toro salvaje (Raging Bull) probablemente su film más logrado. Biografía del boxeador Jake LaMotta que obtuvo dos premios de la Academia de Hollywood: al mejor actor (De Niro) y mejor edición. En esta década, otro Oscar se lleva Paul Newman por El color del dinero (The Color of Money, 1986) con su memorable vuelta al rol de Eddie Felson rememorando el personaje de The Hustler de 1961.

Los 80 será una década muy movida, pues alternará la realización con la producción y la participación en pequeños papeles como actor, en películas de otros autores. El escándalo lo afectará, pues las reacciones de rechazo y condena, sobre todo de la Iglesia católica, generadas por La última tentación de Cristo (The Last Tentation of Christ, 1988) promueven la prohibición de la pelicula en varios países. No obstante obtiene su segunda nominación al Oscar.

Buenos muchachos (Goodfellas, 1990) toma a la pareja protagonista de Toro salvaje, De Niro-Pesci, en una historia de mafiosos italianos que se debaten entre la lealtad y la ambición. Cabo de miedo (Cape Fear, 1991) era un intenso thriller, un remake de otro clásico de 1962 que interpretara Gregory Peck y Robert Mitchum. El resto de la década se desviará hacia otros temas pero sin alcanzar, aparentemente, esa mirada incisiva y reveladora de la sociedad americana mostrada años atrás. Mirada histórica (La edad de la inocencia/The Age of Inocence, 1993), mafias en Las Vegas (Casino, 1995), drama religioso budista (Kundun, 1997) y drama de enfermeros neoyorkinos (Vidas al límite/Bringing Out the Dead, 1999) completan sus preocupaciones artísticas.

En el siglo XXI, Scorsese se lanza a una especie de épica histórica que relata el origen de los primeros grupos pandilleros en la Nueva York del siglo XVIII en Pandillas de Nueva York(Gangs of New York, 2002).

Otro relato épico, esta vez centrado en la figura del magnate Howard Hughes, interesó a Scorsese. Aunque El aviador (The Aviator, 2004) es, en principio, un encargo que recibió Scorsese cuando otros directores -Michael Mann, que al final figura como productor de la cinta, fue uno de ellos- se descolgaron del proyecto. Sin embargo, "hay mucho tiempo, presupuesto, esfuerzo y cuidado en este filme interesante y entretenido", explica el director. "Todo lo que se ve en la película es lo que estaba en el guión de John Logan -hizo 15 versiones del libreto-, que es espléndido y que pone el acento en los mejores años de Hughes, cuando estaba en su plenitud y lleno de creatividad, aspectos que te dan las claves de su caída y declive posterior, de su deterioro. Yo creo que fue el precio que tenía que pagar por haber llegado tan alto."

"La idea de volar es fascinante -continúa Scorsese-, es algo mágico y romántico, y estoy seguro que cuanto más sabes de aviones, uno se siente mucho mejor. Howard Hughes puso a prueba innovadores prototipos de aeronaves que él mismo diseñó y construyó, compró la aerolínea TWA y batió varios récords de velocidad. Y esa idea me fascinaba porque en esa época el único terreno para conquistar era el cielo, el resto ya estaba ganado."

El aviador fue la película con más nominaciones (11 en total) para los premios Oscar 2004, entre ellos, el de Mejor película y mejor director (la quinta vez para Scorsese); sólo obtuvo cinco: Mejor actirz de reparto (Cate Blanchet), dirección artística, fotografía, edición y vestuario.