Si Robert de Niro, quien lo recibió años atrás está considerado el mayor exponente de la capacidad camaleónica de un actor, Meryl Streep puede presumir de ser su principal competidora entre las féminas, sobre todo en el dominio de los acentos. El último tour de force de la prestigiosa actriz de rasgos nórdicos, flamante Premio Donostia de este año, ha sido cantar y bailar en Mamma mia!. Meryl Streep, doble ganadora del Oscar y candidata frustrada a otros doce más, nació en Nueva Jersey el 22 de junio de 1949. Su madre, llamada como ella Mary Louise, y su padre trabajaban en la industria publicitaria. Estudió Arte Dramático en Vassar, sin prescindir de enseñanzas complementarias sobre guión, decorados y vestuario, recibiendo su diploma, tras intervenir en seis montajes teatrales, en 1975. Desplazada a Nueva York, tardó un par de años en ganarse el afecto de la crítica, y su rostro se popularizó para el gran público con un papel televisivo en la dramática serie "Holocausto", que le valió el premio Emmy. Su primera aparición cinematográfica se produjo en Julia (1977), con Jane Fonda, a la que siguió al año siguiente El francotirador, donde hizo pareja con De Niro y logró una primera nominación al Oscar. La ex esposa de Kramer contra Kramer le dio su primera estatuilla, a mejor actriz de reparto, en 1980. Tres años después lograría la de actriz protagonista por La decisión de Sophie. La amplia lista del resto de sus nominaciones corresponde a títulos inolvidables: La amante del teniente francés, Silkwood, África mía, Tallo de hierro, Un grito en la oscuridad, Recuerdos de Hollywood, Los puentes de Madison, Cosas que importan, Música del corazón, El ladrón de orquídeas, y El diablo viste a la moda. Pero el público la recuerda también por Amor a primera vista (de nuevo con De Niro), La casa de los espíritus, Río salvaje, Las horas, El mensajero del miedo, Leones por corderos... Premios de interpretación en Cannes y Berlín, seis Globos de Oro, y la periódica visita a los escenarios de Broadway completan la biografía laboral de toda una especialista en dar vida a mujeres complicadas, sensibles o trágicas, cuyas incursiones en la comedia nunca le han dado tanto rendimiento. Meryl Streep está casada con el escultor Don Gummer, con el que ha tenido cuatro hijos, y mantiene su privacidad alejada de Los Angeles y del mundanal ruido de la farándula neoyorquina. Recibirá el premio Donostia –sin duda el más inapelable de los últimos años- este viernes de manos del actor español Eduardo Noriega y el cineasta norteamericano Jonathan Demme, que la dirigió en El mensajero del miedo.