SINOPSIS
La sorprendente historia de Alain Devegney un sub-brigadier de la gendarmería de Ginebra. Tras ser víctima de una agresión en un país africano, este antiguo militante de la extrema derecha, se vuelve consciente de la necesidad de diálogo e intercambio intercultural. Con la ayuda de una joven mujer de origen franco-tunesino, que ha trabajado con varias asociaciones y la complicidad de un policía titulado en Ciencias de la Educación, Devegney sienta las bases de un proyecto inédito de integración y mediación. El objetivo de este innovador proyecto es transformar las relaciones entre la policía y las diferentes comunidades extranjeras de Ginebra.
REFERENCIA
Este documental precede al primer largometraje de ficción de la franco-suiza Ursula Meier (Besançon, Francia, 1971), Espaldas sólidas (Des épaules solides, 2002), que también forma parte de esta muestra.

“En Ni policías, ni negros, ni blancos, la dificultad era conservar ese equilibrio tan frágil. Podría haber tratado con ironía a ese sub-brigadier de policía con un pasado en la extrema derecha. Pero es un hombre de una gran inteligencia humana y no miente. Tiene una historia. Hijo y hermano de delincuentes, creció en medio de un caos familiar. ¿No se habrá vuelto policía para aprender a poner orden? (...) Además, tengo la necesidad de querer a los personajes que filmo. Todo el tiempo tenía la necesidad de filmarlo mientras se ponía y se sacaba el uniforme. Verlo con su piel, un poco de grasa, eso me tranquilizaba”, ha declarado Ursula Meier.

Premios y Festivales
º 2002 – Premio de la Télévision Suisse Romande, Visions du réel
º 2002 - Festival Cinematográfico Internacional, Nyon