SINOPSIS
Sylvia Plath, una especie de niña prodigio literaria con la ambición de convertirse en una gran poeta, llega a Cambridge con una beca. Cuando lee los poemas de un joven inglés llamado Ted Hughes se empeña en conocerle. Ted le da su dirección y tras una noche de borrachera recitando poesía hacen el amor. Durante un intenso noviazgo entre Cambridge y Londres, Ted descubre que Sylvia ya ha intentado suicidarse al menos una vez y que vive atormentada por la relación con su padre Otto, ya fallecido. Después de casarse, Sylvia se sumerge en el trabajo y sueña con todas las novelas que quiere escribir, sin embargo, cuando se dispone a hacerlo, se siente bloqueada. Al mismo tiempo, se vuelve cada vez más paranoica debido de la atención que Ted presta a otras mujeres.
REFERENCIA
Christine Jeffs nació en Nueva Zelanda (1963) donde estudió sociología y geografía en la Universidad de Massey y entró en la industria cinematográfica para trabajar en la post-producción, en el ámbito del sonido. En 1990 completó el diploma en montaje de la Escuela Australiana de Cine, Televisión y Radio y después trabajó como montadora de cine y publicidad.

Su primer largometraje fue Rain (2001), para el que escribió el guión basado en la novela de Kirsty Gunn. La película participó en muchos festivales internacionales y la revista Variety eligió a Jeffs como uno de los diez directores del futuro.

Sylvia (2003) es su segunda película, historia de la relación entre los poetas Sylvia Plath y Ted Hughes, y su influencia en los problemas psicológicos de Plath y la transformación de ésta en una de las poetas más destacadas del siglo veinte. Producida por la BBC, la película la protagonizan Gwyneth Paltrow y Daniel Craig (el recientemente elegido nuevo James Bond).

“La película es una historia de amor y otra del esfuerzo de Sylvia Plath por hacer frente a la vida como persona creativa y como madre. Me interesaba no sólo la historia de amor sino además las implicaciones de la unión de dos fuerzas creativas y cómo este hecho dificultó su vida en común”, comenta la directora Christine Jeffs.

El proyecto de la película llevaba varios años en fase de desarrollo y de repente un día Jeffs recibió una llamada de su agente: “Estaba en mi granja en Nueva Zelanda cuando me llamó para decirme que tenía que leer un guión. Cuando me di cuenta de que era una película sobre Sylvia Plath fue como un sueño hecho realidad. El siguiente paso era conocer a Gwyneth y a los que iban a financiarla. Fue así de rápido: un día estaba en la granja con los caballos y al día siguiente me tenía que marchar a Nueva York”.