DIRECTOR

Helena Coan

Film sobre la icónica actriz Audrey Hepburn, una de las mayores estrellas de Hollywood en la historia del cine. Una mirada a su faceta más íntima, la de una persona que dedicó gran parte de su vida a cuidar de los demás. 

Competir con el talento de Audrey Hepburn (1929 - 1993) era un reto para cualquier artista de cine. Su inteligencia, mezclada con una dulzura encantadora y su increíble mundo interior, reflejado vagamente en su delicada forma de interpretar, le dieron la sofisticación que cautivó a millones de personas (entre ellas grandes figuras como Givenchy o Cary Grant).

Sin embargo, Audrey nunca fue plenamente consciente de su encanto. En parte debido a una infancia difícil, su vida fue una eterna búsqueda de amor incondicional. Recalcó en varias ocasiones que le hubiera gustado quererse un poquito más, y no negó su deseo de cambiar algunas cosas de sí misma. De gustos sencillos y fiel a sus momentos de intimidad, apenas mostró un ápice de engreimiento.

Además de ser una persona excepcional, Audrey dejó huella en innumerables películas como Desayuno con diamantes (Breakfast at Tiffani, 1961), dirigida por Blake Edwards y basada en la novela homónima de Truman Capote; y por el estilo con que lució algunos de los vestidos más icónicos de la historia (Sabrina, 1954).

Protagonizó tanto dramas desgarradores en los que aparecían mujeres valientes y luchadoras (Calumnia / The Children’s Hour, 1961) como maravillosos musicales con un toque de humor entre las que destaca My Fair Lady (1964) de George Cukor.