DIRECTOR

Nathan Ambrosioni

Él tiene 30 años y acaba de salir de la cárcel, después de 12 años en prisión. Lo tiene todo por aprender en un mundo que ya no conoce. Ella tiene casi 24 años y vive una vida sin excesos, con dificultades para llegar a fin de mes. Cuando él se encuentra con ella, su vida se ve sacudida, pero ella está dispuesta a ayudarlo a volver a una vida normal.

Un realizador precoz

Banderas de papel (Drapeaux de papier, 2018) es el tercer largometraje del cineasta francés Nathan Ambrosioni (Grasse, 1999), realizado !con tan solo 19 años! También autor de varios cortos, este jovencísimo autor comenzó a hacer películas desde temprano y aunque sus padres no están en la industria del cine, lo alentaron en su pasión. Banderas de papel es su primera película producida de manera “profesional”, ya que, apasionado por el cine de terror durante su adolescencia, dirigió dos cintas “caseras”: Hostile (a los 15 años) y Therapy (a los 17). Es la película Mommy (2014), de Xavier Dolan, la que le provoca ir a otro tipo de cine: "Me gustó mucho la película, me hizo entender que podíamos hacer que el espectador sintiera algo más que miedo, el clásico recurso del cine de terror. Me encanta el cine que provoca algo sensorial. Me gusta ir al cine a ver a la gente llorar: una película que logra conmover a trescientas personas al mismo tiempo, ¡es fascinante! Quería hacer películas así yo también”.

Inspiración

Ansioso por escribir sobre la noción de libertad, Ambrosioni tuvo la idea de Banderas de papel al leer un artículo en Liberation dedicado a un ex preso que se encontró totalmente solo cuando fue liberado, una vez cumplida su condena: "Hablaba de la libertad como algo tangible, material, cercano e inalcanzable, que lo atraía y asustaba a la vez. Sus palabras me inspiraron para la escena en la que Vincent va al psiquiatra (…). Sus preguntas riman con las mías, a mi bajo nivel".

Desde cero

Nathan Ambrosioni comenzó a escribir Banderas de papel cuando estaba en su último año. Sin haber estudiado nunca escritura de guiones, comenzó por su cuenta con la ayuda de un software en línea que lo ayudó a dar forma a su guion. A pesar de su inexperiencia, esta fase no le fue difícil porque es un ejercicio que le encanta. Escribió en paralelo cómo debía ser el montaje, acostumbrado a editar sus películas él mismo. Una vez finalizada esta especie de versión 1 del guion en dos semanas, se acercó a varias empresas, entre ellas Sensito Films. Después de varios intentos, termina conociendo a la productora Stéphanie Douet quien lo empuja a reelaborar su guion. Con su bachillerato en mano, obtiene su primer adelanto en septiembre de 2017 y comenzó a filmar en enero de 2018.

(Fuente: www.allocine.fr)