DIRECTOR

Marie Amachoukeli-Barsacq, Claire Burger, Samuel Theis.

Aunque Angélique tiene ya 60 años, le siguen gustando la diversión y los hombres. Por la noche, para ganarse la vida, les hace beber en un cabaret cercano a la frontera alemana. Con el tiempo, los clientes escasean y acepta casarse con un asiduo, Michel.  

Mil noches, una boda (Party Girl, 2014) es la ópera prima realizada a 3 manos, una unión poco usual, que han llevado a cabo Marie Amachoukeli-Barsacq (París, 1979), Claire Burger (Forbach, 1978) y Samuel Theis (Forbach, 1978). La cinta recibió la Cámara de Oro de en Cannes y fue nominada a los César y a los Premios del Cine Europeo.

“La idea nació hace más o menos cuatro años, llegó en varias etapas”, cuenta Samuel Theis, uno de los realizadores. “Hace falta saber que los tres somos amigos desde hace tiempo. Esta intimidad de 15 años, la habíamos puesto a prueba en el trabajo primero colaborando en el cortometraje de fin de estudios de Claire (Burger) en la Femis, que se titulaba Forbach y que había sido seleccionada en la Cinéfondation. El corto estaba ya basado en Angélique y mi familia. Nos permitió ver que había en ella un verdadero potencial de actores a explotar. Como en el corto, es un elemento real de la vida de mi madre el punto de partida de esta historia: el matrimonio en el que se embarcó casi a los 60 años aunque no estuviese enamorada. Este acto se preguntaba sobre cómo, cuando se ha pasado toda la vida en plena noche, se puede encontrar la puerta de salida... (www.cineuropa.org)  

En la cinta cada miembro de esta familia juega su propio rol y alrededor de ellos, para encarnar los otros personajes, se optó por actores no profesionales.

Los realizadores cuentan cómo fue el paso de la realidad de esta familia a la ficción: "Partimos del contexto autobiográfico: la cuestión de los niños de Angélica, su vida en el cabaret, su matrimonio, su hija Cynthia colocada en un hogar de acogida, etc. Luego tuvimos que ficcionalizar los hechos, organizarlos en una historia cinematográfica. Con sus hijos, dejamos las relaciones verdaderas. En este sentido, no inventamos nada, pues la base era lo suficientemente fuerte. Decidimos que el matrimonio era el hilo que tomaría toda la película. Y a partir de estos elementos reales, tuvimos que encontrarle al personaje de Angélica un fuerte desarrollo, y para esto también inventar escenas, situaciones, problemas, sin dejar de ser fiel a lo que los personajes básicamente son. Así que fue un trabajo de equilibrista, caminando sobre el filo entre la ficción y la realidad. Estábamos los tres garantes de este delicado equilibrio, sabiendo que la ficción siempre nos pide que hagamos una acción fuerte, pero el hecho de utilizar lo real nos obligaba a ser precavidos”. (Dossier de prensa, Unifrance) 

Premios: 

• Premios César: 2 nominaciones incluyendo Mejor ópera prima
• Premios del Cine Europeo: Nominada a European Discovery - mejor ópera prima
• Festival de Cannes: Mejor ópera prima y Mejor reparto ("Un Certain Regard")
• Festival de Gijón: Sección oficial largometrajes a concurso