Gloria, una mujer de 40 años sin trabajo, sin familia y sin domicilio fijo, pasa la mayor parte del tiempo en un bar de Nancy. Frances, una popular presentadora parisina, está casada con Claude, un renombrado escritor; pero, aunque en público parecen la pareja perfecta, en privado, ella se acuesta con mujeres, y él hace lo propio con hombres. En los años 80, estas dos mujeres se conocieron en un hospital psiquiátrico y se amaron con la pasión propia de la adolescencia. Todo en sus vidas era salvaje e intenso: sexo, drogas y punk rock. Veinte años después, sus caminos están a punto de cruzarse de nuevo.
REFERENCIA
Como cineasta, Virginia Despentes (Nancy, 1969) es conocida por su polémica cinta Viólame (Baise-moi, 2000), codirigida con Coralie Trinh Tih, sobre dos mujeres que realizan un viaje de sexo y violencia, rompiendo las normas y asesinando a todos los hombres que se les atraviesan. La cinta era una adaptación de su propia novela publicada en 1993.
Despentes ha seguido publicando sus novelas -dos de ellas llevadas a la pantalla por otros directores: Les jolies choses (2001), por Gilles Paquet-Brenner, con Marion Cotillard, y Tel pére telle fille (2007), dirigida por Olivier de Plas-, y dirigido un documental para la televisión Mutantes (Féminisme Porno Punk) (2009).
En 2011 rueda su segundo largometraje de ficción, Bye Bye Blondie, nuevamente adaptación de una novela suya publicada en 2004, que relataba la apasionada relación entre dos personajes Eric y Gloria. La pelécula en cambio cambia la relación a dos mujeres: Gloria y Frances. "Escribí el libro en 2003, y no era una historia lésbica. La película, si. Cuando hice la película, ocho años más tarde, el romance lésbico me pareció una buena idea", cuenta la realizadora.
Cuando comenzó la adaptación de la novela "me mantuve fiel tanto a los personajes como a la época, y luego no podía imaginar al actor capaz de hacerle frente a Béatrice Dalle. En ese entonces, ella y yo vivíamos en el mismo barrio, y nos veíamos de vez en cuando. Pasamos un día entero revisando los actores con los cuales ella se sentiría a gusto besándose en pantalla, sin éxito. Y fue Béatrice la que sugirió cambiar el personaje masculino por uno femenino".
La realizadora entonces pensó en Emmanuelle Béart, incluso antes de saber si ella aceptaría el reto. Hizo el primer borrador del guion y se lo envió. "Había nacido también otro interés: Hay pocos film comerciales con dos chicas de protagonistas y era estimulante reunir a Béatrice y Emmannuelle que no habían trabajado juntas, siendo ambas una referencia de los años 80: en cierto sentido es Manon del manantial [(Manon des sources, 1986)] reencontrándose con Betty Blue [(37º, 2 le matin, 1986)]".
Contrario a Viólame, donde mostraba escenas de sexo frontal, en Bye Bye Blondie Despentes evita el sesgo del sexo radical y las escenas de sexualidad lésbica no aparecen en pantalla: "No he tenido que filmar desnudos para demostrar que Gloria y Frances se aman y se desean. No quería hacer una película de lesbianas para satisfacer la visión masculina de ver a dos mujeres desnudas en una cama, por eso obvié la escena de la bañera muy típica de las películas pornográficas dirigidas a este público".
Guion: Virginie Despentes, adaptación de su propia novela
Producción: Sébastien de Fonseca, Cédric Walter
Fotografía: Hélène Louvart
Montaje: Martine Giordano
Director de Arte: Laurie Colson, Patrick Dechesne
Intérpretes: Emmanuelle Béart (Frances), Béatrice Dalle (Gloria), Pascal Greggory (Claude), Sasha Andres (Véro), Jean-Marc Royon (Michel), Olivia Csiky Trnka (H?l?ne)
Distribución: Embajada de Francia