SINOPSIS
Desde el divorcio Alberto ya no pasa tanto tiempo con Lucía y Federico. Los tres salen hacia las termas una madrugada de tormenta, las vacaciones van a ser cortas y hay que aprovecharlas al máximo. Siempre entusiasta, Alberto trata de que nada arruine sus planes. Pero las piscinas cerradas por tiempo indeterminado y las miradas reprobatorias de sus hijos hacen que pierda el control. Rápidamente los ánimos se vuelven más susceptibles y el clima más pegajoso. Mientras tanto la lluvia sigue cayendo y la casa que Alberto alquiló parece ir haciéndose cada vez más chica.
REFERENCIA

Las realizadoras uruguayas Ana Guevara (Montevideo, 1980) y Leticia Jorge (Montevideo, 1981) se hicieron amigas estudiando Ciencias de la Comunicación en la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad Católica del Uruguay. Comenzaron a escribir juntas y en el 2006 filmaron El cuarto del fondo, su primer cortometraje en conjunto, con la productora Medio Limón Films. En el 2008 filmaron su segundo corto Corredores de verano, ya asociadas a Control Z Films. Ambos proyectos fueron seleccionados y exhibidos en varios festivales de todo el mundo. Tanta agua (2013) es su primer largometraje, galardonado en los festivales de Berlín, San Sebastián, Miami, Guadalajara, Cartagena y recientemente en el de Lima, donde recibió el Premio al Mejor actor (Néstor Guzzini).

Las autoras cuentan cómo surgió la idea: “La película la empezamos a escribir un verano después de que Leti contó una anécdota graciosa que tenía que ver con irse de vacaciones y que lloviera. Teníamos ganas de escribir sobre la relación de una nena con su papá y ese parecía un buen contexto. Empezamos a escribir con la impunidad de quien no piensa mucho en el momento del rodaje: niños, lluvia, lejos de Montevideo. Difícil para una ópera prima, peleamos con eso por bastante tiempo, pero la verdad es que en ese tiempo el guión y los personajes crecieron, fuimos encontrando el corazón de la historia de a poco”.

Afirman las realizadoras que el guion fue basado no sólo en experiencias propias sino “de otra gente también. Fue un proceso no solo de introspección sino también de observación y no deja de ser, como en toda película, una construcción. Elegir a los actores fue muy importante. Todo cobró otra dimensión. Los personajes se fueron cargando de las características propias de cada uno de ellos y mientras ensayamos y filmamos terminamos de encontrarlos. Claro que es muy personal, más allá de que retrate o no vivencias propias”.

En cuanto a la construcción de los personajes, las autoras explican: “Desde el guión estaban bien trabajados, teníamos muy presente la importancia de ciertos detalles que a lo mejor en el papel pasaban desapercibidos, pero que en la película le dan el énfasis a las escenas. Trabajar con chicos no nos intimidaba porque ya lo habíamos hecho. Pero cada persona es distinta y siempre se necesita construir una relación desde la cual la dirección sea posible. Nosotras lo hicimos desde un vínculo de confianza que se generó con los actores en los ensayos. Fue en ese proceso que empezamos a encontrar los detalles en los personajes que los hacen más personas, en eso tanto Malú (Chouza) como Joaquín (Castiglioni) y Néstor tuvieron mucho que ver. El trabajo con Néstor por ejemplo, la búsqueda de Alberto y la relación con su hija fue bastante exhaustiva. Digamos que terminamos de construirlo juntos, el del papá era el personaje que necesitaba más composición y el que por momentos teníamos menos claro”.

(Declaraciones de Ana Guevara y Letici Jorge tomadas de: www.punto-cine.com)

Premios:
• Festival de San Sebastián, Premio Norteado
• Festival de Berlín, Selección oficial, sección Panorama
• Festival de Miami, Gran Premio del Jurado, competencia iberoamericana, y premio al mejor guion
• Festival de Guadalajara, Mejor ópera prima
• Festival de Cartagena, Premio de la crítica internacional