Adaptación muy libre del popular cuento de los hermanos Grimm, ambientada en los años 20 en el sur de España. Blancanieves es Carmen, una bella joven con una infancia atormentada por su terrible madrastra, Encarna. Huyendo de su pasado, Carmen emprenderá un apasionante viaje acompañada por sus nuevos amigos: una “troupe” de enanos toreros.
REFERENCIA
Luego de ser aclamado por la crítica y el público (500.000 espectadores), con su ópera prima, Torremolinos (2003), entrañable mirada a la España conservadora de los años 70 a través de las peripecias de una joven pareja que se convierte en toda una sensación como artífices del cine porno, el bilbaíno Pablo Berger tardó nueve años en completar su segundo largometraje, Blancanieves (2012), una propuesta verdaderamente arriesgada y valiente por haber sido rodada a la manera del cine mudo y en blanco y negro.
No era nada fácil para el realizador, cuyo proyecto, escrito en 2005, era además de gran presupuesto: "¿Dónde va ese loco?", se decían los productores a los que se animó a presentar el guion. "Nunca se va a hacer esta película. El cine mudo murió hace 80 años y tienes que desistir de esta aventura", le recomendaban. Pero Berger no desistió y encontró un productor, Ibon Cormenzana, tan aventurero como él y también de Bilbao. (1)
De esa unión nació la película, sin además ningún tipo de ayuda en España, ni de cadenas de televisión ni por parte de la Administración. "Menos mal", confesaba Berger, "que la Berlinale, el ICAA francés y un productor francés creyeron y confiaron en el proyecto. En España encontramos todo tipo de dificultades y por eso parecía un sueño imposible. Estuvo a punto de no llegar a puerto. Hemos podido realizar esta gran producción tal y como estaba diseñada, con grandes decorados y grandes estrellas del cine ibérico, gracias al apoyo internacional y a que todo el equipo artístico y técnico se ha bajado sus salarios" (1).
Protagonizada por Maribel Verdú, Daniel Giménez Cacho, Ángela Molina, Macarena García e Inma Cuesta, Blancanieves se inspira en el cuento de los hermanos Grimm. Pero es mucho más que un cuento en imágenes. Es un melodrama, una historia de amor, un homenaje al cine mudo de los años veinte. Y esto último la acerca a ese fenómeno que constituyó el film francés The Artist, de Michel Hazanavicius, ganador de cinco Oscar (incluyendo mejor película y dirección).
El realizador bilbaíno está más que agradecido al éxito arrollador del film francés: "Nos ha abierto puertas, ha sido algo así como el rompehielos. Lo que ha hecho The Artist es romper con la creencia de esas palabras que antes asustaban a productores, exhibidores y público, muda y en blanco y negro, y que de alguna manera se asociaba con cine aburrido y antiguo", confiesa Berger (1).
Berger se entusiasma al hablar de la potencialidad y la modernidad del cine mudo, ese en el que se refugiaba de joven en la oscuridad de las salas. "Yo he mirado al pasado para hacer algo nuevo. Es preferible partir de un estereotipo o de cosas que parecen antiguas para realizar algo novedoso. Dentro del cine ya se había inventado todo a finales de los años veinte que para mí es la era dorada. Lo que espero es que el hecho del blanco y negro y del mudo sea simplemente una anécdota, porque lo importante de toda película es la historia, el guion, los actores, la emoción. Espero que el espectador se olvide a los cinco minutos de que está viendo una película muda y en blanco y negro, que entre en este viaje, que empatice con los protagonistas y que sueñe despierto". Por todo ello, es un convencido del futuro del mudo y de nuevo pone el ejemplo de The Artist, que ha demostrado la oportunidad que tiene el cine mudo en la industria y la taquilla. "Si Blancanieves tiene éxito, habremos abierto el camino a que ese cine sea una forma de expresión. El cine mudo exige más atención al espectador porque tiene que estar más atento a todo lo que ocurre en la pantalla. Si el espectador no sale de ese estado hipnótico, la satisfacción final de ese viaje es muy superior a una película sonora y en color".
Una madrastra malvada que ama el lujo y el famoseo (en el filme se llama Encarna), unos cálidos enanos toreros, una joven que huye de su pasado y un hombre postrado en una silla de ruedas. Todos estos ingredientes, junto a la música de Alfonso de Villalonga, conforman el atractivo de esta cinta que ha sido aclamada por la crítica española.
"Siendo precisos, el origen de la historia de Blancanieves es una foto de los enanos toreros, yo me imaginé que la protagonista era torera, y por ende, su papá tenía que ser un torero muy grande y famoso. Su madre había sido cantaora. Así que la cinta se convirtió en una muy flamenca e ibérica" (2), ha detallado Berger sobre el origen de la cinta.
Al ser una cinta en blanco y negro, el principal riesgo que Berger temió es que el público no se sintiera cómodo con una historia silente y con un argumento inusual: "El espectador no debe tener miedo a las películas diferentes, es una cinta muda, pero musical; es una producción que exige, pero que sí hipnotiza con esta aventura, hay gente que dice que ha tenido experiencias sensoriales. Está hecha para el público infantil, para los cinéfilos y para todos los que van al cine a entretenerse" (2), expresó.
Finalmente Berger ha declarado que la cinta no tiene que ver con la nostalgia ni con la imitación de las películas de la década de los 20, sino con tener "un pie en el futuro y otro en el presente. La verdad es que la nostalgia es una palabra que no me gusta para nada" (2).
Notas:
(1) Declaraciones tomadas de: http://cultura.elpais.com
(2) Declaraciones tomadas de: www.informador.com.mx
Premios:
- Festival de San Sebastián: Premio Especial del Jurado y Concha de Plata a la Mejor Actriz (Macarena García)
- Premios Goya. 10 galardones, incluyendo Mejor película, guion original, actriz (Maribel Verdú) y actriz revelación (Macarena García)
- Premios Ariel: Mejor Película Iberoamericana
- Premios del Círculo de Escritores de Cine: Mejor película, director, guion original, actriz revelación (García), actriz de reparto (Ángela Molina), fotografía, montaje y banda sonora
- Premios Gaudí: Mejor película, dirección artística, música original y vestuario
Guion: Pablo Berger; inspirado en el cuento de los hermanos Grimm.
Producción: Pablo Berger, Ibon Cormenzana y Jérôme Vidal.
Fotografía: B/N: Kiko de la Rica.
Montaje: Fernando Franco.
Música: Alfonso de Vilallonga.
Director de Arte: Alain Bainée.
Intérpretes: Maribel Verdú (Encarna, la madrastra), Daniel Giménez Cacho (Antonio, el padre), Pere Ponce (Genaro, el chófer), Ángela Molina (doña Concha), José Maria Pou (don Carlos), Inma Cuesta (Carmen de Triana), Macarena García (Carmen / Blancanieves), Sofía Or
Distribución: Cines Unidos