DIRECTOR

Jessica Hausner

Christine ha pasado gran parte de su vida recluida en su silla de ruedas y, en un intento por huir de su aislamiento, decide hacer un viaje a Lourdes, el famoso lugar de peregrinaje situado en los Pirineos. Una mañana se levanta y se da cuenta que le ha curado lo que aparentemente parece un milagro. Es así como el líder de un grupo de peregrinos, un seductor voluntario de la Orden de Malta de 40 años, empieza a interesarse en ella. Christine tratará de aferrarse a esta oportunidad de ser feliz que acaba de recibir mientras que su curación causará envidia y admiración.

Lourdes (2009) es el tercer largometraje de la cineasta austriaca Jessica Hausner (Viena, 1972) tras Lovely Rita (2001) y Hotel (2004), ambas presentadas en la sección Una Cierta Mirada del Festival de Cannes.

Lourdes consiguió el Premio de la Fipresci y el Premio Signis en el Festival de Cine de Venecia, y obtuvo el Giraldillo de Oro a la mejor película en el Festival de Cine Europeo de Sevilla.

La cineasta habla sobre el origen de la idea de la película: “Conozco muy bien la religión, ya que he crecido en una familia católica, hasta que me alejé de la fe. El milagro es uno de los aspectos más interesantes del cristianismo. Una paradoja, una interrupción, casi una ruptura con la lógica, que nos conduce a la muerte. He estado buscando durante mucho tiempo el lugar adecuado para ambientar una película sobre ello. Después de mucha documentación, decidí que tenía que hacerlo en Lourdes”.

Jessica Hausner ha dicho que su película es “una historia cruel - un sueño o una pesadilla. Los enfermos de todo el mundo vienen a Lourdes para recuperar la salud. Esperan un milagro en este lugar sinónimo de esperanza, de consuelo y de curación para los moribundos y los desesperados. Pero los caminos de Dios son inescrutables y la esperanza de que todo salga bien parece absurdo cuando se está al borde de la muerte. Lourdes es el escenario en el que se juega la comedia humana”.

Según la directora mantuvieron "varias conversaciones con monseñor Perrier, obispo de Tarbes y de Lourdes acerca de cómo representar a Lourdes. También hablamos de milagros con algunos teóricos. Lo más interesante es que los propios dignatarios católicos son conscientes de la ambivalencia del milagro. Nosotros nos planteamos todas estas preguntas y la Iglesia debería aportar una respuesta. La cuestión del sentido de la vida está en el centro de mi película, pero también lo está en el centro de las reflexiones de la Iglesia".

La cineasta, que se define laica, señala que "la primera vez que visité Lourdes quedé traumatizada por el peregrinaje de personas enfermas. Me desconcertó la esperanza de la que se nutrían, me sorprendió la ambigüedad de ese lugar por el negocio que hay detrás de todo ello".